FIBROMIALGIA, donde empieza la búsqueda de lo invisible

Hoy hablaremos sobre la FIBROMIALGIA, donde empieza la búsqueda de lo invisible, un artículo dedicado a ver desde el ojo del enfermo y fomentar su visibilidad pues… No siempre hay que ver para creer.

Desde el año 1993, cada 12 de mayo se celebra el Día Mundial de la Fibromialgia y del Síndrome de la Fatiga Crónica, coincidiendo con el natalicio de Florence Nightingale, enfermera que quedaría postrada en su cama durante 50 años a causa de esta enfermedad.

¿QUÉ ES LA FIBROMIALGIA?

La fibromialgia fue reconocida en 1992 por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y otras organizaciones médicas internacionales como una patología de reumatismo no articular, que se caracteriza por un cuadro de dolor musculoesquelético crónico y generalizado de origen desconocido, sin que existan otras patologías o alteraciones que lo expliquen1.

El dolor crónico va acompañado, en muchas ocasiones, de síntomas como:

  • Fatiga.
  • Depresión.
  • Ansiedad.
  • Rigidez articular.
  • Cefalea.
  • Sensación de hinchazón en manos.
  • Trastornos del sueño.
  • Perdida de sensibilidad en extremidades.

A pesar del dolor, las estructuras afectadas no presentan daño o inflamación2 .

La fibromialgia tiene un gran impacto sobre las actividades motoras de la vida cotidiana, así como en todos los aspectos psicológicos que ello conlleva, mermando significativamente la calidad de vida de quien lo padece.

Pueden llegar a aparecer dificultades funcionales en grados variables.

La principal dificultad para diagnosticar esta patología es que se desconoce su causa y los síntomas que la acompañan son indicios compartidos con otras muchas dolencias. Además, para determinar que el paciente la padece no hay radiografía u otra herramienta de apoyo diagnóstico3.

Según datos de la OMS, se estima que entre el 1 y el 4% de la población mundial padece fibromialgia, afectando 10 veces más a las mujeres que a los hombres.

TRATAMIENTO

En general puede hablarse de dos tipos de terapias fundamentales, farmacológicas y no farmacológicas.

Los farmacológicos se centran en paliar los síntomas con resultados muy dispares. Los principales son los antinflamatorios no esteroideos, antidepresivos y otros con menos referencias como la hormona del crecimiento, aunque en todos los casos hace falta mayores estudios con mayor evidencia4.

Se desaconseja encarecidamente el uso de opioides fuertes y corticoesteroides, debido a que no se han demostrado mejoras claras y los efectos secundarios y contraindicaciones son de alto riesgo4.

Si bien se han utilizado muchos fármacos para distintos síntomas de la fibromialgia su eficacia es limitada y no da respuesta a toda la sintomatología de la enfermedad.

Dentro de las terapias no farmacológicas con mayor evidencia podemos encontrar:

  • La acupuntura5,6, eficaz a la hora de reducir algunos síntomas como la fatiga y el dolor usándose como terapia complementaria.
  • Cambios en la dieta.
  • Algunos complementos que han demostrado mejoras en la función física.
  • Terapias psicológicas cognitivo-conductuales, que han presentado una gran eficacia para mejorar el afrontamiento del dolor, estado de ánimo e incapacidad.

Pero, aunque hasta la fecha no existe un tratamiento o intervención estándar que elimine los síntomas de la fibromialgia, siendo el abordaje multidisciplinar el más recomendado, de entre todas las terapias, incluyendo las farmacológicas y las no farmacológicas, el ejercicio físico parece ser, a día de hoy, la única recomendación terapéutica que presenta una evidencia científica fuerte para mejorar los síntomas de las personas con fibromialgia7.

 

– Con la fibromialgia, al aplicar dos o más intervenciones como el ejercicio físico, fisioterapia, técnicas de relajación, participación social, terapias cognitivo/conductuales y actividades alternativas (Tai Chi, Yoga, Pilates, trabajo aeróbico y de fuerza), disminuyen la sintomatología (dolor) y mejora el aspecto psicológico”8-.

Desde Inima

Dado que el ejercicio físico es la principal estrategia no farmacológica en el tratamiento de la fibromialgia, desde INIMA queremos ayudarte a mejorar tu calidad de vida confeccionando un plan a medida de cada paciente.

Un plan con un punto de vista bio-psico-social que te ayude a afrontar la fibromialgia de un modo fiable, seguro y definitivo.

Teniendo en cuenta las particularidades de cada paciente, crearemos un programa de ejercicios supervisados, acompañados de educación en dolor y terapia manual, con el que conseguirás una notable mejoría en tu calidad de vida, tanto física como psicológica.

 

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En INIMA disponemos del mejor equipo de profesionales para ayudarte en esta tarea desde la seguridad y comodidad de tu casa. quiero saber más.

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